
Con fama de ser una de las ciudades de Reino Unido con mejor calidad de vida, Bristol se erige como alternativa cultural a Londres. A menos de dos horas de la capital británica, de sus calles han salido grupos musicales como Massive Attack o grafiteros de fama de Banksy. En este rincón junto al río Avon conviven más de 180 nacionalidades que han dejado huella en el legado cultural y la lucha por los derechos sociales.